Los caballos negros son. Las herraduras son negras. Sobre las capas relucen manchas de tinta y de cera. Tienen, por eso no lloran, de plomo las calaveras
Ponte el mono apretao, sirena, que se joda el viento, rompe las horquillas de espuma, y dejame que te remache sonrisas de hierro de esas que disipan
Se solla con las bragas de meter corazones, de tanto sube y baja, de tanto responder a tantas oraciones con brazos de paja, y yo sigo rumiando, blandiendo
Silencio, me estoy tirando al monte, silencio, hay pasos que me vienen siguiendo... pero eso es que me ha dao siempre igual, jaleo, ?tu te vendras conmigo